Vistas de página en total

sábado, 7 de julio de 2012

Un camino que continuar.

Y de repente naces, vienes al mundo sin saber cómo ni por qué,pero estás ahí.
Ser pequeño e inocente expuesto a tantos peligros que de saberlo antes sería de locos.Pero es la hora, es el momento de abrir los ojos, conocer el mundo, nuevas expectativas, conseguir nuevos logros, hacer una vida...
Y entonces es ahí, en ese mismo instante cuando ves a las primeras personas que marcarán tu vida para siempre, tus padres.
Poco a poco vas creciendo, desarrollando y avanzando como persona y haciendo el camino que poco a poco será tu vida.
Tienes que aprender a hacer cosas por ti mismo, independizarte. Pensarás,que rápido,¿no? Pues sí, porque cuando te quieres dar cuenta tu infancia ya ha pasado y eres un adolescente que ya quiere seguir su vida solo, sin nadie que le diga qué y cómo debe actuar y hacer sus cosas. Empiezas a ver a alguien que separa su camino del de otros sin apartarlos completamente del suyo. Alguien que quiere ser independiente pero saber que podrá depender de aquellas personas que le acompañaron en ese tiempo.
Conoces a gente, te unes a la sociedad, tienes amigos, te enamoras, experimentas nuevas sensaciones, nuevos deseos, nuevos impulsos. Cometes errores, te levantas,caes,aprendes.
Te das cuenta de las cosas que de verdad son importantes, de las cosas que son pasajeras e irrelevantes.
Maduras como persona y te das cuenta de que ya no eres un niño, de que ya jugar con fuego y quemarse puede causar un daño muy severo.De que ya las cosas no son tan simples, ya todo se complica y si no te organizas bien y lo echas todo a perder ¡PUM! Todo se va a la mierda y lo que creías tener ha desaparecido; y entonces es ahí, cuando sufres tu primera pérdida, cuando empiezas a valorar lo que tienes antes de perder lo, cuando admites las verdades y los consejos no los entiendes como obligaciones.
Es cuando empiezas a formarte como persona adulta y tu capacidad de madurez te permite hacer cosas y mirar otras de una forma de la que antes para ti era una tontería.
Con el tiempo la vida pasa, te vas dando cuenta con los años de lo que pudiste hacer y no hiciste, de las cosas que deseaste decir y te las callaste, de lo que deseaste recordar y lo olvidaste; y entonces te arrepientes. Empiezas a recriminarte el por qué de esas cosas que se quedaron sin hacer y que, debido a que ya es tarde para hacerlas o tu edad no te lo permite, se han quedado almacenadas en un rincón que ya nadie mira y carece de valor;por eso siempre se dice que, cuando deseas algo, debes hacerlo;cuando quieres decir algo,debes decirlo; cuando deseas recordar algo, no debes olvidar lo; cuando quieres gritar,no debes callar...Porque luego el tiempo pasa y esa persona a la que le quisiste decir tantas cosas ya no está,lo que querías hacer ya quizás no tenga sentido o no lo puedas hacer,lo que querías recordar y gritar ya lo olvidaste y sólo te queda el mero recuerdo que persevera en tu interior.
Por eso, si quieres hacer algo, hazlo,el guardarlo no servirá de nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario